El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que no descarta el uso de presión militar y económica para retomar el control del Canal de Panamá y anexarse Groenlandia, iniciativas que forman parte de su agenda expansionista promovida desde su victoria en las elecciones del pasado 5 de noviembre.

Trump, quien asumirá el cargo el próximo 20 de enero, también declaró que exigirá un aumento significativo en el gasto de defensa por parte de los aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Para aumentar su gasto en defensa al 5% del PIB, frente al compromiso actual del 2%. Argumentó que muchos países no cumplen con su parte del acuerdo y que esto representa una carga desproporcionada para Estados Unidos.

El Canal de Panamá, que ha sido administrado exclusivamente por Panamá desde el año 2000 tras décadas de lucha soberanista, se ha convertido en un símbolo de independencia para el país. El canciller panameño, Javier Martínez-Acha, reiteró la postura oficial: “La soberanía de nuestro canal no es negociable y es una conquista irreversible”.

En Groenlandia, territorio autónomo de Dinamarca y hogar de una importante base militar estadounidense, las declaraciones también generaron reacciones. Desde Copenhague, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, destacó que cualquier acción en el ártico deberá respetar al pueblo groenlandés y reafirmó el compromiso de cooperación con Estados Unidos dentro de la OTAN.

Trump también emplazó al grupo Hamas a liberar a todos los rehenes capturados en Israel antes del 20 de enero, amenazando con una respuesta militar contundente. Además, anunció una inversión de 20 mil millones de dólares por parte de una empresa emiratí, para construir centros de datos en Estados Unidos.