Durante la conferencia presidencial de este martes, el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, informó que continúa la investigación sobre el buque asegurado en el puerto de Altamira, Tamaulipas, que transportaba 10 millones de litros de diésel, con irregularidades en su documentación.

El fiscal explicó que las autoridades detectaron discrepancias entre el tipo de combustible que el barco declaró y el que realmente transportaba. “Nos informaron de un hecho ya consumado. El buque presentó una declaración fiscal que no correspondía con la carga real”, afirmó Gertz Manero.

Al ser cuestionado sobre detalles del cargamento, el fiscal señaló que aún no se cuenta con información confirmada, ya que “toda la documentación aduanal fue falseada, tanto en cantidades como en el tipo de combustible”.

El gabinete de seguridad del gobierno de México consideró este aseguramiento como un histórico golpe al tráfico ilícito de hidrocarburos, en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad, en acciones realizadas en Tampico y Altamira, en esa entidad.

Se detalló que con labores de inteligencia se detectó un buque que arribó a Tampico el pasado 19 de marzo, con una presunta carga de aditivos para aceites lubricantes.