En 2023, al menos 85 mil mujeres adultas y jóvenes fueron asesinadas de forma intencionada a nivel global, lo que representa 140 muertes diarias o una cada 10 minutos. Este nivel de feminicidios sigue siendo una tragedia evitada en muchos casos, asegura la ONU a través de un comunicado lanzado como parte del Día Internacional para Eliminar la Violencia contra la Mujer.

El informe de la Oficina de la ONU Contra la Droga y el Crimen (ONUDC) y ONU Mujeres revela que el 60% de estas muertes ocurrieron a manos de parejas o familiares cercanos. Las víctimas, muchas de ellas, ya habían sufrido violencia física, sexual o psicológica antes de morir.

El fenómeno afecta especialmente a regiones como el Caribe, América Central y África, donde los feminicidios siguen siendo una realidad devastadora. Mientras que, en el continente Americano y Europa, los crímenes suelen ser cometidos por la pareja, en otras partes del mundo, otros miembros de la familia son los principales agresores.

La ONU destaca que muchas de estas muertes podrían haberse prevenido con órdenes judiciales y políticas de protección más estrictas. Sin embargo, la violencia de género sigue siendo difícil de erradicar debido a su arraigo en prácticas y normas sociales.

Sima Bahous, directora de ONU Mujeres, instó a los gobiernos a endurecer leyes y mejorar la recolección de datos para frenar esta ola de violencia.