Más de 60 mil personas (entre ellas numerosos jóvenes) despidieron al papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano, quien falleció el lunes a los 88 años, durante el primer día de la capilla ardiente en la basílica de San Pedro, reveló el servicio de prensa del Vaticano.
“Francisco ha sido un referente muy importante, especialmente para los jóvenes. Nos hizo sentir parte de algo más grande”, compartió Ana Sofía Alicata, una joven argentina de 26 años que llegó junto a su amiga Florencia Soria dispuesta a esperar hasta cuatro horas en la fila.

Miles de personas recorrieron la nave central de la imponente basílica barroca para despedirse unos segundos del jesuita argentino.
La capilla ardiente se mantendrá hasta el viernes por la noche, cuando el sencillo féretro se cierre y se prepare para el funeral de Estado que tendrá lugar el sábado y donde se espera la participación de hasta 170 delegaciones internacionales.

Presidentes como Donald Trump, Javier Milei y Luiz Inácio Lula da Silva, así como el rey Felipe VI de España y el secretario general de la ONU, António Guterres, ya anunciaron que acudirán.

El entierro se realizará en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, un gesto simbólico que rompe con más de un siglo de tradición; siendo el primer pontífice fuera del Vaticano desde León XIII en 1903.