Una noticia sorprendente salió a la luz desde la Patagonia argentina: en Loncopué, Neuquén, encontraron restos fósiles de un ictiosaurio, un antiguo reptil marino que dominó los océanos hace millones de años. ¡Sí, algo así como un delfín prehistórico con alma de depredador!

El descubrimiento fue casi de película: un vecino del paraje Mulichinco notó restos extraños en su campo y dio aviso a las autoridades. Al llegar al lugar, personal de la Dirección de Patrimonio Cultural, con ayuda de Gendarmería, confirmó que se trataba de huesos fosilizados.

Un paleontólogo local identificó al animal: un ictiosaurio, que vivió desde el Triásico Inferior hasta el Cretácico Superior. Estos reptiles evolucionaron de criaturas terrestres que, al igual que los delfines y ballenas, regresaron al mar y se convirtieron en superdepredadores acuáticos.

Ahora, los fósiles están siendo analizados en el Museo Carmen Funes de Plaza Huincul, y podrían aportar más pistas sobre la vida marina del pasado.