El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la firma de una orden ejecutiva para imponer aranceles recíprocos a las importaciones, igualando las tasas que otros países aplican a los productos estadounidenses.

Esta medida, promovida bajo el lema “Hagamos que Estados Unidos sea grande otra vez”, ha generado preocupación por su posible impacto en la economía global, logrando desacelerar el crecimiento y aumentar la inflación.

Además, Trump ha implementado aranceles adicionales a productos chinos por su papel en la producción de fentanilo y ha amenazado con gravámenes a Canadá y México.

La Unión Europea, China y otras naciones han preparado represalias comerciales en respuesta a estas políticas.

Mientras la Casa Blanca defiende la medida como un esfuerzo por mejorar la equidad en el comercio, economistas advierten que podría encarecer bienes para los consumidores estadounidenses y afectar la inversión y el empleo.