El Comité de Finanzas del Senado de Estados Unidos mantuvo en 3.5% el impuesto sobre remesas, como parte del proyecto de ley de reconciliación presupuestaria impulsado por los republicanos, descartando así un aumento propuesto recientemente por el senador Eric Schmitt.
El gravamen, que afectará a las transferencias internacionales de dinero enviadas desde EEUU., deberá ser cubierto por quien realiza la remesa. Sin embargo, el texto legislativo de 549 páginas excluye de este impuesto las transacciones realizadas con tarjetas de crédito o débito, una medida relevante para migrantes mexicanos que utilizan cuentas abiertas con Matrícula Consular como identificación.
Además, el documento establece que solo quienes cuenten con Número de Seguro Social (SSN) podrán acceder a un crédito fiscal, lo que beneficiaría a residentes permanentes y ciudadanos, pero no a migrantes indocumentados.
La entrada en vigor del impuesto está prevista para el 31 de diciembre de 2025.
La propuesta forma parte de un paquete más amplio que incluye recortes fiscales permanentes basados en las políticas de 2017 del presidente Donald Trump, así como reducciones al programa Medicaid. Los republicanos buscan aprobarla bajo un proceso fast-track antes del 4 de julio, con la intención de evitar aumentos fiscales superiores a los 4 billones de dólares, según el comunicado del Senado.
Deja un comentario