El presidente Donald Trump sorprendió al anunciar su participación directa en las negociaciones arancelarias entre Japón y Estados Unidos, en una reunión que originalmente reuniría al secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y al ministro japonés de Revitalización Económica, Ryosei Akazawa.
Akazawa viajó a Washington con la intención de mantener las conversaciones centradas en comercio e inversión. Sin embargo, Trump dijo a través de su red Truth Social que también abordará temas como los costos militares del despliegue estadounidense en Japón y el “comercio justo”.
“Espero que se pueda llegar a un acuerdo que sea bueno (¡grande!) para Japón y Estados Unidos”, expresó.
La reunión se da en medio de tensiones por los aranceles impuestos por Trump: un 24% sobre exportaciones japonesas, un 10% universal y un 25% sobre automóviles, sector clave para Japón. Aunque algunos aranceles están suspendidos por 90 días, el impacto ya preocupa a Tokio.
Mientras tanto, el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, afirmó que no cederán con rapidez ni contemplan represalias por ahora. Aun así, más de 75 países ya han solicitado negociar, según Bessent, quien aseguró que “hay ventaja en ser el primero”.
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